Este día lo recuerdo muy bien (a una semana de entrar a trabajar con los niños), les tocó a varios de ellos representar una obra en teatro guiñol y uno de los que más me llamó la atención, por lo elaborado de su escenario y de sus muñecos fue éste equipo que aparence representado en la foto.
Sentado en un rincón, me acordé de las palabras de mi antiguo tutor de CONAFE (y amigo) Jared, el cual me dió este consejo que guardo desde ese lejano 2005: "Para trabajar con los niños, tienes que ser un poco como ellos..." y viendo la obra me acordé, al ver sus rostros anonadados, lo que muchas veces se nos olvida al crecer: el sorprendernos de las cosas sencillas de la vida.
A partir de ese día y hasta ahora, trato de no olvidar esa sensación de asombro ante las cosas simples de la vida y las cuáles, como sabemos (aunque muchas veces se nos olvide) son las más valiosas.
Saludos.
P.D. Les dejo este link Los niños necesitan ser felices, no ser los mejores. Espero que les guste, saludos =)
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